Con la llegada del verano en Latinoamérica, estamos deseando disfrutar del sol, la playa y las actividades al aire libre. Sin embargo, esta estación nos obliga a prestar aún más atención a la salud de nuestra piel, debido a su exposición en comparación con las otras estaciones del año. En este artículo nos centraremos en las principales dermatosis que aparecen o aumentan en verano y cómo podemos tratarlas.
QUEMADURAS SOLARES
La quemadura solar o eritema solar es una lesión grave de la piel y se produce cuando la exposición al sol supera la capacidad de defensa natural de la piel frente a los rayos UV. Por ello, es importante aplicarse un protector solar con el factor de protección adecuado para su tipo de piel y reaplicarlo varias veces a lo largo del día, evitando la exposición al sol durante las horas de máxima radiación UV.
Si sufre quemaduras solares, debe tomar algunas medidas para aliviar las molestias y ayudar a tu piel a regenerarse. En primer lugar, evite seguir exponiéndose al sol hasta que su piel esté completamente sana. Dúchese rápidamente con agua tibia y utilice compresas frías para aliviar el enrojecimiento y el rubor. Las cremas y lociones a base de ingredientes como el aloe vera, la manzanilla, las vitaminas E y B5 deben aplicarse suavemente sobre la piel afectada como ayuda al proceso de curación natural de la piel.
REACCIÓN CUTÁNEA A LAS PICADURAS DE INSECTOS
Las picaduras de insectos son bastante frecuentes en verano y pueden provocar exantema (enrojecimiento), picor, molestias, inflamación e incluso dolor. Para evitar las picaduras, es esencial utilizar repelentes de insectos que se adapten al tipo de piel, edad y localización donde se encuentre. Hoy en día puede encontrar repelentes en varias formas: spray, aerosol, roll-on, crema corporal; dispositivos ultrasónicos, aceites difusores, pulseras, etc.
Sin embargo, si le pican, es importante saber cómo actuar. Evite rascarse las zonas afectadas para evitar que se infecten. En caso de erupción, picor o edema, puede utilizar un antihistamínico y/o aplicar cremas calmantes, antialérgicas y antiinflamatorias.
ACNÉ SOLAR
Se caracteriza por una erupción que afecta principalmente al tronco y los hombros, y que suele aparecer tras una exposición intensa al sol. Su aspecto difiere del acné común, con pústulas (elevaciones de la piel llenas de pus) más pequeñas, menos inflamadas y que se secan más rápidamente.
El acné solar puede prevenirse mediante el uso de protectores solares, preferiblemente con una base libre de aceites, aplicados antes y durante la exposición al sol.
MELASMA
Afección cutánea que se manifiesta por la aparición de manchas de color marrón o marrón grisáceo que suelen aparecer en la cara. Dado que la exposición al sol agrava esta afección, es en verano cuando es más frecuente. La mejor manera de evitar que el melasma se agrave es utilizar un protector solar eficaz durante todo el año, así como protegerse de la luz y el calor.
MICOSIS
La micosis cutánea es un tipo de infección causada por la proliferación de hongos, que provoca síntomas como picor, enrojecimiento y descamación, y puede afectar a cualquier zona del cuerpo. En verano, suele afectar a los dedos de los pies («pie de atleta») o a la ingle. El pie de atleta es una infección muy contagiosa que puede extenderse rápidamente a otras partes del cuerpo. La micosis inguinal, por su parte, se considera la segunda dermatofitosis más frecuente y puede extenderse a toda la región púbica, afectando también a las nalgas y los muslos. Es tres veces más frecuente entre los hombres y, al igual que el pie de atleta, puede tratarse con pomadas antimicóticas. Una de las principales precauciones es evitar mantener el cuerpo sudoroso o húmedo durante mucho tiempo. Además, puede utilizar polvos o talco para la piel en los pliegues del cuerpo o en las zonas donde la transpiración es más intensa, secar bien la piel y favorecer la ropa interior de algodón.
Para resolver o atenuar estos efectos frecuentes durante el verano, se recomienda utilizar diferentes cosméticos o medicamentos que, a su vez, pueden causar otros efectos indeseados. Si experimenta alguno de ellos, no dude en contactarse con el laboratorio fabricante, que debe disponer de un sistema de vigilancia de la seguridad de sus productos para recibir e investigar su caso durante la estación más calurosa del año o fuera de ella.
En PHV Latam, la seguridad del paciente es nuestro objetivo.